Una de las limitaciones a las que nos enfrentamos a la hora de desarrollar un sitio web es el reducido número de fuentes con el que podemos trabajar, a espensas de que el usuario que navegue posteriormente por ese sitio web tenga instalada la fuente o fuentes que utilizemos.
Para evitar ésto, Google ha puesto en marcha un proyecto que ha llamado Google Font Directory, y que permite ampliar el número de fuentes disponibles para usar en nuestros sitios web, mediante un directorio de fuentes que están disponibles desde sus servidores.
Para utilizar Google Font Directory sólo tenemos que navegar por su directorio de fuentes, elegir la que deseamos usar (de las 18 que ahora hay disponibles, y cuyo número se espera ampliar en el futuro), e insertar en nuestra página web un enlace a una hoja de estilo CSS determinada (desde la propia herramienta nos facilitan el código a insertar), y listo.
Cabe reseñar que todas las fuentes disponibles en Google Font Directory están licenciadas open source, así que puedes utilizarlas sin problemas en tus proyectos.